Las canas y el Sol - Cuidados y mitos

Las canas y el Sol - Cuidados y mitos

Por más que lo intentemos, los años pasan y nuestro organismo nos va dejando señales de ello. Una de esas tantas señales es sin lugar a dudas las canas.

Aunque también es cierto que estos cabellos carentes de color que adornan las cabezas y las barbas de muchos (incluyéndome), pueden aparecer por diversos factores adicionales a la edad, como pueden ser los genéticos, los niveles de stress, el tabaco, e incluso deficiencias nutricionales.

Antes de entrar en el tema es importante que entendamos que tener canas no es una enfermedad, pero sí un posible síntoma de envejecimiento, y para entender porque, explicaré brevemente de donde salen las canas.

En cada uno de los folículos del cabello tenemos unas células conocidas como melanocitos, las cuales cuentan con pigmentos oscuros y claros conocidos como melanina y feomelanina respectivamente, y que al combinarse dan los diferentes tipos de tonos de cabello. Una persona con cabello oscuro tiene más melanina que feomelanina, a diferencia de una rubia cuya proporción será al revés.

Por las causas mencionadas anteriormente, los melanocitos pueden morir y por ende el cabello que nace de ese folículo al no tener pigmentos va saliendo sin color alguno, y ese cabello estimado lector es la tan odiada y también querida cana.

Y digo odiada y también querida, porque actualmente existe todo un movimiento por reivindicar la belleza del uso natural de las cabelleras grises y/o blancas.  Y sin ir muy lejos tengo ejemplos muy cercanos, mis padres lucen sus cabezas blancas con una dignidad que es de admirar.

Esta reivindicación elegida por algunos, conlleva una serie de cuidados que permiten mantener la cana en buen estado y sobre todo cuando el sol y otros elementos como el salitre o el cloro de las piscinas hacen que coja un tono amarillento que apaga su brillo natural, dando un aspecto no deseado. Por ello te presento tres trucos para mantener unas canas blancas, saludables, hidratadas y hermosas.

Truco número 1 – El champú.

Ciertamente en la Farmacia existen muchos tipos y marcas de champús, y todos tienen la función de mantener un cabello saludable. Dentro de toda esa gama están los champús para cabellos blancos, los cuales dentro de su composición contienen pigmentos violetas que permiten neutralizar los tonos amarillentos producidos por el sol.

Truco número 2 – Fotoprotectores capilares

Así como nuestra piel requiere de protección solar, nuestro cabello no escapa de esta necesidad y muchas veces lo pasamos por alto. Estoy seguro que si el cabello se pusiese rojo como la piel cuando se quema, seríamos más conscientes de esta necesidad.

El protector solar para el cabello permite protegerlo de los rayos UVA, a la vez que hidrata y evita la resequedad del mismo, permitiendo que las fibras capilares no se dañen, evitando ese color amarillento no deseado en la cana.

Lo recomendado es aplicar el fotoprotector capilar tanto en el cabello como en el cuero cabelludo antes de exponerse al sol y repetir su aplicación cada dos horas.

Truco número 3 – Mascarillas

El pelo blanco suele ser bastante seco y si a esto le sumamos el deterioro natural que sufre el cabello frente al sol, vemos la necesidad de utilizar una mascarilla nutritiva y regeneradora que permita reparar el cabello, reconstruyendo su capa exterior y permitiendo mantener su brillo natural, evitando así esos tonos amarillentos.

Las mascarillas son tratamientos muy intensos por lo que se recomienda usarlos una o dos veces por semana, pero si estamos expuestos al sol mucho tiempo, bien podemos incrementar su frecuencia de uso.

Estos tres trucos por separado te permiten tener un buen resultado, pero combinados te permitirán tener resultados extraordinarios, luciendo y reivindicando la belleza de una cabellera blanca al natural.

Pero como dije al principio, esta es una tendencia que no les gusta a todos y eso hay que respetarlo. Incluso, hay quienes tienen alguna falsa creencia sobre las canas causadas por los cientos de mitos que existen sobre ellas y que a continuación me permitiré desmentir las más populares:

“Si te arrancas una cana, te nacerán siete más a su alrededor”

Este mito goza de popularidad mundial, lo he escuchado en Caracas y también acá en Ourense y créanme que es falso.

Si te arrancas una cana, lo único posible es que también arranques el folículo o lo dañes, impidiendo que vuelva a crecer ese cabello.

“Si te pintas mucho el pelo, se te pondrá blanco”

Este mito lo popularizaron nuestros abuelos para evitar que las mujeres se pintaran el cabello cuando esto empezó a ponerse de moda. 

La verdad es que no existe ninguna evidencia que lo avale, de hecho, si así fuera mi hermana tendría el cabello más blanco que la luna, ya que se lo pinta desde que hace 20 años de todos los colores del arcoíris, para muestra les puedo decir que la siguiente foto es de mi hermana.

“Las canas son grises, no blancas”

El cabello gris no existe, al menos que sea pintado con algún tinte. El efecto gris que tienen algunas personas con canas se debe a la combinación del cabello blanco (cana), con cabellos que aún conservan su color natural o con el cabello pintado.

“Las canas tienen mayor grosor que el pelo con color”

Las canas como lo he mencionado dentro de este artículo puede tener un mayor índice de resequedad, dando la apariencia de ser más robusta, pero la verdad es que su diámetro es igual a un cabello con color de la misma persona.

También hay que tomar en cuenta que la refracción de la luz sobre la cana le da una apariencia más gruesa…pero solo es una apariencia.

“Las canas te hacen ver más viejo”

Ciertamente uno de los factores más comunes de la aparición de canas es la edad, pero también es cierto que hay adolescentes que tienen canas y esto no los hacer ver viejos.

Existe toda una tendencia entre los jóvenes que se decoloran el cabello, o que se lo tiñen con tonos platinados y dando como resultado toda una tendencia juvenil, la cual hace que las personas de más edad se sientan incluso mejor luciendo sus tonos blancos al natural.

Así que estimado lector, luego de ver estas recomendaciones y desmentir mitos sobre las canas, siéntete libre de lucirlas, pero siempre protegiéndose del sol.

Por otra parte, si tienes canas, pero prefieres ocultarlas no pasa nada, lo importante es que te sientas bien contigo mismo.

Y por último, si aún no tienes canas, tranquilo que seguramente en algún momento alguna aparecerá y te acordaras de este artículos.