Hoy por hoy, cuando en la Farmacia nos llega una receta de antibióticos, una recomendación muy común que se le da al paciente es que tome un...

Antibiótico y Probiótico, la combinación perfecta!!



Hoy por hoy, cuando en la Farmacia nos llega una receta de antibióticos, una recomendación muy común que se le da al paciente es que tome un probiótico y en las siguientes líneas detallaremos los beneficios de esta combinación.


Lo primero que tenemos que tener claro es que los probióticos son microorganismos vivos (generalmente bacterias), los cuales son beneficiosos para la salud al administrarse en las cantidades adecuadas. Las bacterias más utilizadas suelen ser los del genero lactobacillus y bifidobacterium.


Este grupo de medicamentos permiten mantener una flora intestinal adecuada para prevenir el crecimiento de microorganismos nocivos en el tracto intestinal, ayudando a prevenir diarreas y reduciendo la gravedad y duración de las mismas.


Para nadie es un secreto que los antibióticos que nos ayudan a combatir infecciones, eliminando o deteniendo el crecimiento de bacterias perjudiciales, también destruyen un porcentaje de las bacterias beneficiosas de la flora intestinal, facilitando el crecimiento de microorganismos intestinales que provocan diarrea, siendo la misma uno de los principales efectos adversos de la toma de antibióticos.


Ciertamente hay pacientes que nos pueden indicar que en su caso particular no tiene presencia de diarrea, ni de ningún tipo de efecto adverso gastrointestinal, y esto ya está documentado en diversos estudios que nos indican que dichos efectos adversos se producen en la tercera parte de los pacientes que reciben antibióticos.


Varios estudios demuestras que la toma de probiótico durante el tratamiento con antibióticos dan un efecto beneficioso del probiótico en la flora intestinal, previniendo diarreas asociadas al antibiótico. Pero es importante que sepamos que no todos los probióticos son iguales y dentro de la gran variedad de especies y cepas los más específicos para lograr este efecto frente al antibiótico son el Lactobacillus Rhamnosus y el Saccharomyces Boulardii.


Sea cual sea el probiótico que recomendemos al paciente desde la farmacia, es importante que le indiquemos su correcta posología, ya que existen algunos probióticos que deben tomarse distantes a la toma de antibiótico, evitando así que este último destruya las bacterias que se administran con el probiótico haciendo que este no pueda ejercer el efecto beneficioso que buscamos.